La presente publicación estudia la situación actual de las humanidades. En los últimos años se han eliminado del tronco básico educativo las disciplinas de filosofía, historia y literatura porque no se entiende para qué son y cuál es su importancia o relevancia. En este sentido, carecemos de investigaciones que reflexionen sobre las actuales practicas educativas enfocadas en estos ámbitos del conocimiento y que formulen una nueva difusión de ellos. Desde el siglo XIX, con la llegada del capitalismo industrial, dejó de pensarse en mecanismos que impidieran el rezago de algunas disciplinas. Sin embargo, como propone la autora, no son las disciplinas quienes están en crisis, sino lo que se está haciendo en ellas, que básicamente es generar conocimiento de la misma manera que se hizo desde hace siglos.