Las obras aquí presentadas nos muestran la condición humana en su más cruda realidad. No siempre ésta representa mundos a los que estemos acostumbrados; a veces la ficción de los lugares en donde éstas se desarrollan parecieran haber salido de un texto de Lewis Carroll, y a veces de los recuerdos de cualquier lector, pero en todos los casos la psique humana juega un papel preponderante.
Los personajes se construyen en la medida en la que tratan de sanar las heridas del pasado, en la medida en la que tratan de sobrevivir a pesar de los muchos fantasmas que los persiguen. La revuelta imposible es, sin duda alguna, un libro que hace reflexionar acerca de las relaciones interpersonales y las consecuencias a las que las pueden arrastrar el abandono y la desolación.