Algo tan trivial es ante todo una declaración de amistad para cada uno de los demonios que han marcado la vida del autor: las adicciones –y sus consiguientes procesos de desintoxicación–, la muerte y la autodestrucción.
Fausto Alzati Fernández ofrece en este ensayo un recorrido íntimo que tiene como eje de cohesión el álbum Violator, de Depeche Mode; disco que lo acompañó como una especie de soundtrack en cada uno de estos momentos y cuyas canciones le sirven como pretexto para poner en orden sus recuerdos: familiares, de adolescencia, drogas, amores y, sobre todo, la escritura.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2015. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.