Admirador de Dante, Ungaretti y Pavese, poetas que han tocado en el verso la indagación sobre la naturaleza de lo eterno y divino, Loredo vislumbra el encuentro entre hombres y ángeles desde el enfoque de Jacob quien montado en una escalera que llegara hasta el cielo, contempla la vastedad de imágenes y vivencias que intentan postulan la esencia de los ángeles, sus hábitos, costumbres y transcurrir en el universo, así como la corporeidad de Dios y la importancia de la palabra, "el lenguaje es un tigre de cuchillos áridos/ de huesos que se hacen en el porvenir".
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2005. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.