En 1985 se inauguró la Rotonda de los Sudcalifornianos Ilustres, en ella se depositaron los restos mortales del Gral. Manuel Márquez de León. En el transcurso de cinco años —de 1985 a 1990— fueron trasladados los restos de seis sudcalifornianos más a las criptas de la Rotonda: Manuel Márquez de León, la profesora María Rosaura Zapata Cano, el profesor Jesús Castro Agúndez, el profesor Domingo Carballo Félix, el general Agustín Olachea Avilés, don Ildefonso Green Ceseña y el profesor e historiador Pablo L. Martínez, y se publicó la biografía de cada uno de ellos. Estos grandes hombres representan, en cierta medida, los pilares cuando todo amenaza con derrumbarse.