Javier y Sonia se conocen en una clínica dermatológica. Ambos tienen una forma peculiar, pesimista, de ver la vida; son personas solitarias que han rebasado la barrera de los treinta años. Congenian inicialmente, pero cuando comienzan a vivir juntos, un intenso fatalismo invade a Sonia y decide volver a su normalidad. Al quedarse solo, Javier comienza una búsqueda desesperada. Conoce a múltiples mujeres que, paradójicamente, van reduciendo cada vez más su margen de acción, enfatizando una inevitable caída al vacío.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2010. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.