Mariano Hidalgo y Costilla nos cuenta la historia de su hermano, Miguel; sí, claro, se trata de ese mismo cura que ahora le llaman el padre de la patria, pero que en aquellos días se vio metido en cada lío, que es mejor no recordarlos aquí. Aunque a decir verdad, hay dos o tres cosas que hay que preguntar: ¿sabías que don Miguel tuvo hijos? ¿Sabías que se casó tres veces? Si supieras que, antes de dar el grito, el cura andaba en un baile, ¿te la creerías? Bueno, ¿y si supieras cuál fue su primer apodo? -por supuesto, a él le encantaba-; quizá le hubiera gustado más eso: que en los libros lo llamáramos el zorro y no don Miguel Hidalgo y costilla.