Contiene este tomo las páginas de la Crónica Mexicana de don Hernando Alvarado Tezozómoc, que han parecido dignas de figurar en la Biblioteca del Estudiante Universitario: aquellas que dan idea del nivel de cultura a que habían llegado los aztecas en el siglo XV. Infatigable al describir, con abundancia de detalles, las matanzas de su religión y los combates menores; contradictorios y confuso muchas veces, Alvarado Tezozómoc tiene aún la virtud de provocar admiraciones que frecuentemente la generosidad amplía.
El reciente hallazgo de documentos que arrojan luz sobre la figura del autor, antes borrosa, ha permitido al seleccionador de estas páginas proporcionar nuevas informaciones biográficas, inéditas hasta el momento de imprimirse el tomo; datos y noticias que apenas han trascendido fuera del círculo de los eruditos y especialistas. Gracias a ello, el lector podrá situar al autor en el ambiente en que realizó su obra.
Para suprimir, hasta donde es posible, los escollos que entraña una lectura como ésta, se ha creído conveniente redactar notas ilustrativas de aquellos pasajes que las requieren. Su número es forzosamente limitado, dentro de las proporciones habituales en esta biblioteca.
Incluye textos de Mario Mariscal, Manuel Orozco y Berra, Gonzalo Díaz Migoyo y Germán Vázquez Chamorro.
Hernando Alvarado Tezozómoc, descendiente directo de Axayácatl y de una hija de Moctezuma II, fungió durante los primeros años de la Colonia como intérprete o nahuatlato "farante" o "lengua", como también se les llamó, de la Real Audiencia de México. Entre 1598 y 1609 se dedicó a la elaboración de dos crónicas; la Mexicana, en castellano y la Mexicayotl, en náhuatl. La Crónica mexicana, que ahora presenta nuestra colección, comprende desde los orígenes del grupo mexica en la legendaria Aztlán hasta el momento en que Hernán Cortés llegó a Tlaxcala. Para la primera edición de esta obra dentro de la Biblioteca del Estudiante Universitario (1943), el entonces reciente hallazgo de documentos que arrojaron nuevos conocimientos sobre la figura del autor, permitió al seleccionador de estas páginas, Mario Mariscal, dar nuevos datos biográficos, que permanecían inéditos en el momento de imprimirse la obra. Para facilitar la lectura de este texto, fueron incluidas notas aclaratorias de aquellos pasajes que a juicio del prologuista así lo requerían. |
Edición de Germán Vázquez Chamorro y Gonzalo Díaz Migoyo.
Sobre Tezozomoc se sabe muy poco: que era nieto, por parte de madre, y sobrino-nieto, por parte de padre, del emperador Moctecuhzoma II el Joven; que vivió durante la segunda mitad del siglo XVI y principios del XVII; y que acaso trabajó ocasionalmente como intérprete de nahuatl. Dado lo elevado de su linaje, le hubiera correspondido el gobierno de los indígenas de Ciudad de México, pero, por razones oscuras, el puesto fue ocupado por su cuñado, un plebeyo educado por los misioneros españoles.
La Crónica mexicana, escrita hacia 1598, narra el proceso que permitió pasar de ser unos simples emigrantes despreciados a ser dueños del Cemanahuac, del mundo.
Edición de Germán Vázquez Chamorro y Gonzalo Díaz Migoyo.