Este singular y hermoso libro, uno de los más brillantes tours de force alegóricos y estilísticos de la literatura medieval, no es ajeno al quehacer de los poetas provenzales. Su canto al amor perdido, a la distancia de los siglos, sigue estando lleno de frescura, sin prescindir de la dosis adecuada de ironía. El autor, para ganar el favor de una dama, escribió este ingenioso bestiario, que ha perdurado en el gusto de los lectores por los siglos.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2012. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.