Los textos que integran esta antología forman parte de un corpus muy preciso que se formó a partir de una amplia convocatoria difundida por internet, gracias a muchos poetas que la hicieron conocer a las autoras interesadas en participar en un proyecto no institucional, apoyado por la editorial Viento al Hombro y basado en una investigación que se circunscribió al material recibido. La convocatoria circuló a través de dos continentes: América y Europa. Se solicitó un mínimo de diez poemas a cada autora, con temática erótica, sin importar que fueran inéditos, de poetas vivas con deseos de publicar sus textos en una antología crítica, a la cual se le ha puesto por título Al filo del gozo en homenaje a Rosario Castellanos y como dará referencia a uno de sus texto eróticos.
A través de los cuatro años que llevó conformarla, el proceso de selección fue arduo y significó muchas horas de trabajo y relecturas de poetas. Más que hablar de poetas, habría que hablar de poemas seleccionados, pues si bien quedaron fuera poetas avaladas por trayectorias de reconocimiento internacional, fueron a fin de cuentas los poemas –y no las poetas– los que prevalecieron siempre como derrotero en esta investigación.