Abrevadero de dinosaurios parte de un hecho que, para nuestra fortuna, cada vez resulta más usual en nuestras literaturas: quienes escribieron estas minificciones tienen la convicción de que puede decirse mucho, escribiendo poco. Incluso pueden ir más allá de lo que quisieron señalar, gracias a la colaboración de los lectores. Aquí tenemos más de doscientos cuentos donde se inventan mundos, se comparten sueños y donde a cada instante surgen sorpresas sobre nuestras adormecidas conciencias. Los autores —siete colombianos y veintiún mexicanos— se expresan a través de situaciones inesperadas, con acciones sorprendentes hasta para los mismos personajes, pero en todos los casos se expresan con gran eficacia de elementos literarios. Estas minificciones pasan por el corazón de la literatura fantástica, se regodean en los veneros de los autores clásicos y sufren los terribles espasmos de la realidad. Sorprende que no falte un sólo tema, pues lo mismo se habla del amor, del dolor, de la muerte y sobre todo de la vida. Y así, tocando diversos extremos, estas breverías se vuelven extensas. La compilación rinde homenaje a Tomás Espinosa, quien frecuentó el género con gran maestría.
Eduardo Villegas Guevara
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2014. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.