Como si tener veinte años fuera una empresa que hubiera que acometer con impaciencia porque nadie ha sabido hacerlo bien antes. No se admiten distracciones. No hay tiempo para más que para tener veinte años. Que la muerte interrumpa y atraviese nuestras existencias es un hecho escandaloso al cual hay que sobreponerse a toda prisa porque hay tanto que hacer. Y sólo cuando nuestros veinte años han cumplido a su vez veinte años, se comprende la inasible maravilla e irresponsabilidad de tener veinte años. Sólo cuando la memoria, con su laconismo habitual, reorganiza lo vivido, es uno capaz de darse cuenta de todo lo que sucedía y cuán poco preparados estábamos para vivirlo.
En Antonia, la protagonista recuerda a la amiga cuyo nombre da título al libro, y con la cual convivió en Londres a finales de los sesenta cuando ambas tenían veinte años. La historia reconstruida recorre las experiencias de libertad e independencia que ambas jóvenes mexicanas compartieron en Londres, contra el turbulento trasfondo del "México 68". Concluye alrededor de tres años después cuando el cáncer de Antonia las obliga a tomar decisiones dramáticas y determinantes. La amenaza de muerte irrumpe y cruza sus existencias, es un hecho escandaloso que las obliga a vivir a toda prisa.
En Antonia, María Luisa Puga evoca "varios sucesos que marcaron una generación a finales de los sesenta: el movimiento hippy, las guerrillas en América Latina, la crisis de valores, la discrepancia entre padres e hijos, Tlaltelolco... Y esa sensación que permeaba todo de maravilloso y desconcertante".
Josefina King, periodista
"Sorprendente [...] la novela Antonia [...] Es justo el espacio narrativo de María Luisa Puga, es su trabajo de gran oficio llevado al grado de la perfección, como los joyeros... Se merece un trato especial como mujer escritora de vanguardia".
Martín Casillas de Alba, editor
La amistad es el tema central de esta novela. Dos jóvenes veinteañeras viven en Europa de finales de los sesenta, una época efervecente para la juventud de todo el mundo. Juntas descubrirán la libertad, la represión, el amor y el dolor; en sí, la vida, pero también tendrán que enfrentarse a la sombra de la muerte, cuando el cáncer ataca el cuerpo de Antonia, cambiando el destino de ambas. El mundo externo, lo cotidiano, se ve trastocado por la enfermedad y los días compartidos se volverán recuerdo de toda una vida.