Conforman este poemario apartados sucesivos que unen sus estancias con una visiòn genérica: el exilio. Resonancias de una misma voz desde la expulsiòn del paraíso, la huída de Sodoma, la migración de un pueblo empujado por las guerras hasta la conciencia de un nuevo arraigo.
Versos que abren su extensa pulsación a otros matices: la inminencia de mujeres en lienzos y retratos que aguardaban a una convocante para hacerse presentes. Las visitantes es una colección de trazos sobre estas mujeres imaginadas, míticas, simbólicas o lentamente observadas en su realidad.
Galerías que acercan tiempos y lugares tan remotos como la voz que canta, ahora, desde un espacio ancestral, repudiado y anhelado.
Quizá por eso la poeta se pregunta en uno de sus versos: ¿No es la nostalgia lo último en perderse?
[Fotografía de portada de Pedro Valtierra. Foto del autor Flor Zertuche.]
