Este libro tiene por propósito mostrar una de las múltiples interacciones que pueden generarse entre la actividad en el dibujo y la literatura. Quienes participamos en él, hemos tomado como punto de encuentro el tema del bestiario, contenido que, si bien no es nuevo en el arte, posee un carácter siempre abierto al ensayo de ideas y posibilidades expresivas. A través de este intercambio entre lenguajes artísticos, buscamos hacer de nuestra propia práctica disciplinaria un pretexto para entablar un diálogo que nos permita retroalimentarnos desde aquello que nos asemeja o nos diferencia como productores de bienes culturales. En este sentido, es primordial centrar la visión en la producción plástica y literaria como instrumentos para intuir, para desbordar la fantasía, para reconfigurar la realidad...