Este libro estudia el género de las adivinanzas desde dos miradas -la española y la mexicana- representaciones de dos tradiciones hispánicas mostrando lo que las acerca y lo que las aleja, las semejanzas y las diferencias, en sus variantes, en su temática, en su léxico, en su estilo, en su métrica o en su estructura. Estas dos radiciones se han armonizado a través de los siglos, como testimonio de un encuentro que ha resultado afortunado y que es muestra de la riqueza y versatilidad de un patrimonio cultural, más allá de los límites temporales y espaciales. Si en España es sabido que la tradición del género se ha delimitado alrededor del enigma, el acertijo y la adivinanza, no es tan conocido su antecedente en los zazaniles o zazanilli y quisicosas prehispánicos, a pesar de haber sido consignados por fray Bernardino de Sahugún en su Historia general de las cosas de la Nueva España, ya en 1557.