Cuando pensamos en los hombres y mujeres de la colonia, suele ser un lugar común referirnos al "oscurantismo religioso" que constreñía sus mentes y su vida diaria. Sin embargo, podría ser que las cosas no fueran tan serias, ni la religión tan limitante, ni la inquisición -en varias ocasiones- tan solícita o temible. La pequeña historia de doña María de Poblete y su milagro de los "panecitos" de Santa Teresa, que aquí se narra, constata esa intervención de la religión en prácticamente todas las esferas de la vida novohispana; pero también muestra las ventajas que algunos supieron encontrar en esa religiosidad.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2001. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.