Para Ernesto Mejía Sánchez, el lenguaje poético es un lenguaje viviente y tiene la facultad de operar mágicamente para crear todo aquello que nombra. Y es ahí donde radica su originalidad poética: en su concepción de la poesía como magia, hechizo, rito o conjuro y en la asimilación de la tradición poética de Occidente: el conceptismo del barroco español y el romanticismo europeo. Después de Darío, será Ernesto Mejía Sánchez quien, a través de la absorción de otras literaturas, de otros autores, construya una obra sin par en la literatura hispanoamericana.
Víctor Ruiz
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2017. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.