Justo el día en que murió Poli, mi gallina, apareció Hoja de Papel. Llegó sin aviso. Hoja de Papel es un caballo. Un caballo blanco. Y, así como llegó un buen día sin aviso, de la misma manera, Hoja de Papel desapareció. En su lugar quedaron las fotografías, los caballitos de madera, cerámica y harina, la estatua que está en el centro del pueblo y la memoria de todos y cada uno de los habitantes de Villa Graciana al lado del caballo más blanco, más maravilloso y más querido que se haya conocido.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2005. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.