Soy un dinosaurio aborda un tema fundamental en nuestros días: la discriminación y el bullying. Es una historia conmovedora sobre la intensa amistad de dos niños que se ven separados por prejuicios sociales. El ambiente opresor en el que se desenvuelven juzga su amistad como “incorrecta” o “insana”, cuando lo que pervive es la inocencia en una etapa imaginativa y sensible como la infancia.
Las imágenes apuntan directamente al lector, porque parten de la premisa indiscutible de que todos alguna vez hemos sido discriminados. En ese sentido cualquiera puede ser el pequeño niño del relato, enfrentándose a problemas de adaptación y buscando un lugar que le corresponda en el tejido social.
Se trata de un libro que no subestima a sus lectores y trata con ternura y comprensión las relaciones interpersonales. Una historia dedicada a todos los que alguna vez se han sentido diferentes , capaz de enfrentarnos con nuestros propios prejuicios.