La Santa María, la carabela que pertenece al mito no menos que a la historia, resucita en La Marigalante para cumplir un sueño pendiente: la llegada a las Islas Orientales, las mismas a las que Colón creyó llegar antes de que se le atravesara otro mundo. Reconstrucción novelada de un viaje real, alternancia de voces narrativas en las que la propia Marigalante cuenta su nacimiento y destino, y reincorpora a su experiencia las rutas y los afanes de Colón, La resurrección de la Santa María es un juego de espejos con quinientos años de tiempo entre uno y otro y todo el mar de por medio.
Es también un relato de aventuras, de los que abundan poco en la literatura mexicana, y echa mano lo mismo de los diarios de viajes que de la bitácora de navegación, reúne el conocimiento náutico con las intuiciones sobre el destino humano y la posibilidad de dirigirlo; pone, en fin y de nuevo, al hombre frente al mar. Este libro de Mario Huacuja ofrece la constancia de un hecho real filtrada por un disfrutable trato imaginario.