Ingresó al Seminario Arquidiocesano de Monterrey, el 20 de septiembre de 1943, ordenándose sacerdote el 26 de marzo de 1955. Ha ocupado, entre otros, los siguientes cargos eclesiásticos: vicario cooperador de la Parroquia de la Madre Santísima de la Luz en Monterrey, Nuevo León (1955); cronista de la Arquidiócesis de Monterrey (1977); secretario del Comité para la construcción de la capilla de Nuestra Señora de Guadalupe en las criptas de la Basílica de San Pedro, en Roma (1987); presidente de la Comisión Diocesana de Educación y Cultura; coordinador de las Comisiones Diocesanas de Educación y Cultura de la Región Pastoral Noreste (1989-1991) y secretario ejecutivo del Congreso Nacional por Regiones (1990). Es Caballero de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén (1984), Capellán Magistral de la Asociación Mexicana de la Soberana y Militar Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta; Caballero de Gracia Magistral (1993); Caballero de Gracia de la Orden Ecuestre, Ínclita Religión Militar Constantiniana de San Jorge (1995), y Capellán de la Representación en México (1997). Es también miembro fundador de la Asociación de Escritores de México (1966) y del Seminario de Cultura Mexicana en Monterrey (1973). Pertenece a la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística (1972); Asociación Mexicana de Historia Regional (1973); Sociedad de Historia Eclasiástica Mexicana (1974); Academia Nacional de Historia y Geografía (1976); Sociedad Cultural Sor Juana Inés de la Cruz (1977); Instituto Mexicano de Cultura (1979); Academia de Ciencias Históricas de Monterrey (1980); Academia de Letras “Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza” (1982); Asociación Nacional de Cronista de Ciudades Mexicanas (1983; 1986-1987); Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística (1984); Sociedad Mexicana de Filosofía (1985); The Britanic Society (1985); Sociedad Católica Mexicana de Filosofía (1986); Academia Hispanoamericana de Artes, Ciencias y Letras (1986); Internacional Biographical Association (1988); Asociación de Cronistas de Ciudades de Michoacán (1990); Academia de Estudios Genealógicos y Heráldicos de México (1993); Sociedad Tamaulipeca de Historia, Geografía, Estadística de Matamoros (1995); Sociedad Alemana de Genealogía (1995); Academia Mexicana de la Historia (1996) y de la Sociedad Mexicana de Bibliófilos (1997). Ha publicado miles de artículos periodísticos con temas de literatura, arte, historia y religión en periódicos y revistas nacionales y del extranjero como El Porvenir, Siempre Adelante, Iuventus, Trabajo y Ahorro, Símbolo, Constructores y Vida Universitaria, de Monterrey, Nuevo León; La Familia Cristiana, Spes, Presagio; Incunable, de Salamanca, España; Catolicismo, Oriente y Ángeles de lasMisiones, de Madrid. Ha sido periodista en los viajes del Papa Paulo VI (1965) y en la Oficina de Prensa del Vaticano (1965; 1978), en Tierra Santa (1966) y en Bogotá, Colombia (1968). Estuvo como reportero del periódico El Norte en Europa (1975, 1979, 1980 y 1988) y como director de la “Hoja Dominical” de la Arquidiócesis de Monterrey (1959-1969).

Ha recibido premios y distinciones como la Cruz de Jerusalén en bronce (1964) y en plata (1965); Primer Premio en el Concurso Histórico Literario (1975); Palmas Académicas otorgadas por la Academia Nacional de Historia y Geografía (1975); Medalla Oficial del Ayuntamiento, con el escudo de la Villa de Santayí, Mallorca (1977); Medalla de Acero al Mérito Histórico Capitán Alonso de León (1978); Medalla Oficial del Ayuntamiento, con el escudo de la Villa de Santayí, Mallorca (1977); Medalla de Acero al mérito Histórico Capitán Alonso de León, Presea de la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística (1978); Medalla de plata y pergamino de la Sociedad Cultural Sor Juana Inés de la Cruz (1980); placa de plata de la Décima Asamblea de Sociedades Numismáticas de la República Mexicana (1982); Diploma de la Presidencia Muncipal de Monterrey, por su meritoria labor en beneficio de la comunidad regiomontana (1987); Presea Estado de Nuevo León en reconocimiento al mérito cívico (1988); Medalla José de Escandón, otorgada por la Sociedad Tamaulipeca de Historia, Geografía y Estadística; Diploma de la Villa de Santayí, Mallorca, por sus estudios sobre el Obispo Verger (1990); Medalla y Diploma de la Universidad Autónoma de Nuevo León por su destacada contribución a la cultura nuevoleonesa (1993).

La ininterrumpida labor intelectual de Aureliano Tapia Méndez se ha encaminado al quehacer periodístico como cronista de su tierra natal, al literario y al histórico. Ha publicado cuento, ensayo y poesía. En su producción ensayística se ha interesado por estudiar aspectos religiosos vinculados con la literatura y la historia; asimismo se ha dado a la tarea de realizar numerosas ediciones de autores mexicanos como la Correspondencia Alfonso Reyes / Ignacio H. Valdés. 1904-1942. De sus estudios sorjuanistas, a Tapia se debe el hallazgo de una carta de 1681 y dirigida por Sor Juana al Padre Antonio Núñez de Miranda. También elaboró la edición facsimilar de un poema heroico en honor a la monja jerónima que data de 1695 por el poeta José Zorrilla y Vico, y dio a conocer varios retratos desconocidos de Sor Juana y de diversos personajes de su época. Sobresalen sus ensayos de carácter biográfico por su acuciosa fidelidad de datos, en los que nos transmite su propia visión de las personalidades de sacerdotes, monjas, obispos y arzobispos; a través de textos fundamentales situados dentro de un marco histórico “con toda su problemática interpretativa que lleva no a construir una visión apologética, sino a transmitir figuras históricas sin reservas que puedan implicar oscuridades en el claro de la biografía, con el auxilio, además, de un estilo que se define por su franca claridad”, como en La angélica Madre Genoveva donde expone la biografía de la religiosa española Genoveva Torres Morales que pese a su impedimento físico llevó y practicó entre sus feligreses una práctica de vida estoica con altos valores morales. La sangre de un mártir nos cuenta la vida tormentosa del sacerdote michoacano José Ochoa, fundador de la Congregación de la Sagrada Familia en Uruapan, Michoacán. Otra veta de su ensayística se ha encaminado a diversos trabajos hagiográficos como el libro titulado Nuestra Señora de la Esperanza donde ofrece, ampliamente, la historia del hallazgo de la imagen, su culto y sus templos; asimismo incluye dos extensas secciones, documental e iconográfica, –con documentos inéditos de los años 1748 a 1751– y fotografías de la imagen de la Virgen, de las festividades en su honor y de los obispos que la veneraron. Aureliano Tapia, interesado en el ejercicio de su ministerio eclesiástico, publicó una serie de libros didácticos sobre temas bíblicos, liturgia y devocionarios en ediciones accesibles y de fácil lectura para los iniciados en la instrucción religiosa. De su obra poética, Alfonso Rubio y Rubio opina: “voz acentrada, transfigurada en el vuelo del arrebato poético para cantar con esbelto cántico la significación de María y el decoro de su templo en la vida de la metropolitana ciudad de Monterrey. De gran elocuencia la de su fuego religioso, derramado en el estallido de sus salmos laudatorios o en el recogido fervor de sus plegarias por los vivos y los muertos” (Salmos y Letanías y Once salmos, dos odas, dos oraciones y un coro hablado). Sus cuentos reunidos en el volumen El caso perdido del número 19 y otros cuentos, narrados con vehemencia y emotividad, con un lenguaje coloquial y con desenlaces sorpresivos; tiene como tema la vocación sacerdotal y alude a los preceptos de la ideología cristiana: la salvación del mundo, la idea de la eternidad, la misión evangélica y la redención. Otro de sus intereses han sido la numismática y la heráldica, ha diseñado una diversidad de escudos para algunos obispos de México y para la Catedral y la Basílica de Guadalupe en su tierra natal.